Recorrido 3: Chiado y Bairro Alto
Aconsejo hacer este recorrido a media tarde, para visitar el Chiado, y después buscar un sitio para cenar en el Bairro Alto y acabar la noche allí.
Para llegar al Chiado podemos hacerlo de varias maneras:
- Caminando desde la Baixa. Es ir hacia el oeste, subimos unas cuantas escaleras y ya estamos en el Chiado.
- Por las escaleras mecánicas del metro Baixa/Chiado. No hace falta pagar. Te metes en el metro que está en la calle Rua do Crucifixo (Baixa) y por las escaleras mecánicas llegas hasta la Rua Garret, en pleno Chiado. Así te ahorras subir escaleras y fuertes pendientes.
- Tranvía 28. Si vienes de algún sitio donde esté el tranvía, por ejemplo la Alfama, y lo coges, tiene paradas por el barrio del Chiado también.
- Elevador de Santa Justa. Es el ascensor que hay en la rua Santa Justa. Te hacen pagar por subir, pero te vale tu maravillosa tarjeta siete colinas, así que no pagas, aunque probablemente te encuentres cola. Desde él obtendrás también unas buenas vistas de Lisboa.
- Elevador da Gloria. Desde praça Restauradores. Te deja en el Bairro Alto, no en Chiado, pero como los dos barrios están juntitos, luego pateas por allí y es prácticamente lo mismo. Lo bueno es que te deja en un mirador con excelentes vistas, el de San Pedro de Alcántara.

- Elevador da Bica. Desde praça Comerço sigues andando hacia el oeste y así ves esa zona, incluida la praça do Municipio, en la rua do Arsenal, donde está el ayuntamiento. Y busca el elevador da Bica.Todas estas calles que verás por el camino son muy céntricas y típicas lisboetas, muy del estilo de la Baixa pero menos comerciales. La calle por la que sube el elevador es muy empinada y estrecha con aspecto de lo más cutre, pero tiene encanto con sus casitas lisboetas en mal estado y las ropas tendidas en los balcones. El elevador te deja en Largo Calhariz, una calle que si la sigues recta hacia el este te lleva hasta la praça Luís de Camoes. Es la opción que menos he leído en las demás guías, y es la que yo hubiese hecho si hubiese ido con más tiempo, más que nada para ver toda esa zona que hay al sur del Chiado, que no la pone en las guías turísticas, pero no deja de ser céntrica y tiene su gracia verla.

Una vez en el CHIADO, no hay más que patear por sus calles. Se trata de un barrio elegante que fue reconstruido tras un incendio sufrido en 1998 que arrasó cuatro manzanas. Se dice de él que es el Montmatre lisboeta, por ese toque bohemio que denotan sus calles, y porque en otro tiempo fue lugar de encuentro favorito de literatos y políticos. Aquí vivió Fernando Pessoa, escritor y poeta, uno de los más notables de Portugal a principios del siglo XX. Hay una estatua de él en la terraza del Café A. Brasileira, en la Rua Garret, ya que era cliente habitual de este local.
Hoy en día es un barrio con muchas cafeterías, restaurantes de cierto nivel, tiendas de diseño, numerosas librerías antiguas y mucho ambiente sobre todo de tarde-noche.
Sus calles princales son CARMO, calle de tiendas donde hay hasta un Fnac dentro de un centro comercial, Rua Garret, la más importante, donde está el café A.Brasileira y más comercios, y la PRAÇA LUÍS DE CAMOES, que marca el límite con el Bairro Alto y donde ya empiezas a notar mucho ambiente y terrazas.
Si quieres ver alguna cosilla más que pasear por el barrio, en Largo do Carmo (subiendo desde rua Garret por Calçada Sacramento), aparte de que es una plaza con bastantes terracitas también, hay una iglesia en ruinas que no se reconstruyó para recordar el terremoto de 1755, que fue el que la destruyó. En su interior también está el museo arqueológico do Carmo. Se trata la IGREJA O CONVENTO DO CARMO, y de hecho el elevador de Santa Justa te deja justo enfrente e incluso la puedes ver desde arriba al cruzar su pasarela. Esta misma iglesia la puedes ver de lejos desde la praça Rossio, en una esquina en lo alto.
Como curiosidad, en Rua Garret está la librería Bertrand, que se dice de ella que es la más antigua del mundo.
Adentrándonos en Rua Garret, llegamos cerca de rua Misericordia, donde empieza el BAIRRO ALTO. La praça Luis de Camoes marca el límite. El barrio en sí no tiene nada especial que visitar, más allá de que es otro de tantos barrios céntricos con edificios típicos lisboetas y escalones curiosos que unen algunas de sus calles estrechas y empinadas. Lo interesante de la zona es disfrutar de su ambiente, donde encontrarás restaurantes de todo tipo (con fados y sin) y multitud de bares pequeños de copas que se llenan hasta altas horas de la madrugada.
Para volver, si lo haces antes de la una, puedes ir otra vez hasta el metro de Chiado, en la Rua Garret. Si es más tarde pues ya vas de taxis o bajas hasta la Baixa, que por allí debe haber algún autobús nocturno (o te ligas una portuguesa o un portugués, y duermes calentito/a en su casa)(es una opción, ¿no?)(¿Qué?...).